Trabajo Final del Curso de Aromaterapeuta Profesional presentado por Diana Fernanda Montini
Introducción:
La vida es un movimiento permanente, la naturaleza no es estática, al contrario, es fluctuante y sobre todo rítmica, un ejemplo son los ciclos de las estaciones del año, los ciclos lunares y los ciclos diarios de luz – oscuridad. Es evidente que estos ritmos del ambiente influyen sobre la actividad de los seres vivos; en nuestro organismo, estos ciclos están regidos por un reloj biológico y toda alteración de este ritmo, va a generar trastornos psico-físicos que deterioraran nuestra salud.
Desde la aromaterapia, ofrecemos una mirada holística capaz de aliviar, ordenar y sincronizar nuestro Reloj Biológico.
Justificación:
Los Horarios de nuestro organismo
A través de los tiempos, nuestro organismo ha evolucionado, adaptándose a los cambios ambientales, logrando hacerse más eficiente para realizar todas las actividades necesarias para subsistir con el menor requerimiento de energía posible. Es por eso, que hoy podemos distinguir diferentes horarios en los que mi cuerpo es más eficiente para realizar actividad física, estudiar, consumir lípidos sin engordar, dormir, tomar alcohol y metabolizarlo mejor, entre otras.
De la misma manera que nuestra fisiología fue cambiando con el tiempo, también acompañaron ciertas patologías y pudimos observar que las alteraciones de los ritmos biológicos pueden afectar la salud de los seres vivos.
Todos los seres vivos contamos con un Reloj Biológico que genera internamente los Ritmos diarios que nos ayuda a organizar temporalmente diversas funciones fisiológicas y del comportamiento de nuestro organismo en armonía con el ambiente que nos rodea. En ciertas ocasiones nuestro reloj interno puede sufrir una desregulación o desincronización respecto de las señales ambientales externas, generando un desequilibrio interno en nuestro organismo.
La vida actual como está constituida hoy, altera el correcto funcionamiento de nuestro Reloj Biológico y su puesta en hora. Lo vemos en la iluminación superficial que prolonga la jornada de actividad y nos quita horas de sueño, los turnos rotativos de trabajo nocturno, los viajes trans-meridianos (Jet Lag), pudiendo afectar seriamente nuestra salud al provocar una desincronización interna y generar en consecuencia desórdenes de sueño, insomnio, depresiones estacionales, obesidad, diabetes, otros. Además, un mayor riesgo de contraer ciertos tipos de cánceres, pudiendo potenciarse más con la vida sedentaria y las dietas hipercalóricas.
La aromaterapia como arte y ciencia milenaria que consiste en la utilización de sustancias naturales extraídas de plantas (hierbas, flores, resinas, cortezas, frutos, otros) que ayudan a crear balance, armonía y promover la salud de cuerpo, mente y espíritu, es una herramienta holística con propiedades calmantes, vigorizantes, alivian dolores, rejuvenecen, curan, relajan. Estas sustancias naturales extraídas cuidadosamente se denominan aceites esenciales que son concentrados y muy potentes, tanto que en general no se usan puros y sí en bajísimas proporciones, unidos con algún portador (agua, aceites vegetales, cremas, otros), que su elección dependerá de la vía de ingreso al organismo (inhalación, cutánea) que necesitemos utilizar.
Objetivo:
La Aromaterapia es una herramienta interesante a la hora de cronometrar nuestros Relojes Biológicos y de esta manera recuperar el equilibrio necesario para sostener nuestra salud.
Metodología de la investigación:
Ritmos Biológicos: La mayoría de las funciones biológicas no son constantes, alternan períodos de máxima actividad y otros de baja actividad. Nosotros experimentamos distintas actividades que cambian a lo largo del día, donde hay marcados patrones temporales en distintos aspectos fisiológicos y conductuales tales como el sueño/vigilia, actividad /reposo, alimentación, metabolismo hepático, pH, temperatura corporal, otros, pero…cada cosa a su tiempo…
Estas variaciones son regulares, rítmicas y altamente predecibles: Son los Ritmos Biológicos. Estos Ritmos pueden ser diarios, mensuales, estacionales o anuales. De lo que nos vamos a ocupar son los ritmos que presentan una periodicidad próxima a las 24 hs, son los Ritmos Circadianos (Circa, latín: cerca, a las 24 hs).
Estos Ritmos Circadianos están comandados por los Relojes Biológicos cuyas características esenciales son:
– Son Innatos, están genéticamente determinados.
– Conservados evolutivamente, a lo largo de toda la cadena evolutiva desde algas hasta el hombre.
– Se mantienen en condiciones ambientales constantes
– No se ven afectados por cambios en la temperatura ambiental
– Son sincronizables, se ponen en hora mediante señales que provienen del medio ambiente) luz, alimentación, temperatura, otros).
El sistema circadiano de los mamíferos está compuesto por un oscilador principal constituido por los Núcleos supraquiasmáticos del hipotálamo y millones de osciladores periféricos localizados en la células del organismo. El sistema se sincroniza con el ambiente a través de la retina que informa a la Glándula Pineal sobre las condiciones de iluminación (inhibe o produce melatonina la hormona del sueño) y esta a su vez a los supraquiasmáticos. Pero también a través de otras señales ambientales que son censadas por nuestros sentidos, estos trasmiten esa información hacia los núcleos donde todas estas señales confluyen y son integradas. Los supraquiasmáticos modulan temporalmente una serie de centros nerviosos y glándulas endócrinas que generan los distintos ritmos comportamentales y fisiológicos generales del organismo (como sueño/vigilia, alimentación, secreción de algunas hormonas, otros.) tienen un rol fundamental en la generación de los ritmos metabólicos que se producen en todo el organismo. (1)
A su vez los supraquiasmáticos coordinan el funcionamiento de todos los relojes presentes en órganos y tejidos, estos osciladores periféricos también controlan los ritmos locales que constituyen a la regulación temporal de la vida.
Disrupción del reloj circadiano y cómo nos afecta a la salud:
Todos los seres vivos contamos con un reloj biológico que genera internamente los ritmos diarios que nos ayuda a organizar las diversas funciones fisiológicas y del comportamiento de nuestro organismo, en armonía con el medio ambiente cambiante que nos rodea, pero en ocasiones nuestro reloj interno puede sufrir una desregulación o desincronización respecto a las señales ambientales externas, generando un desequilibrio interno (en la homeostasis) de nuestro organismo. Varias situaciones de la vida moderna actual a la que estamos expuestos a diario sin darnos cuenta, alteran este funcionamiento pudiendo afectar seriamente nuestra salud y generar en consecuencia desórdenes del sueño, insomnio, depresiones estacionales, obesidad, diabetes hasta cáncer.
Problemáticas que genera la Disrupción circadiana:
-Trastornos del sueño: las principales señales sincronizantes son los ciclos de luz/oscuridad de nuestro entorno y que el reloj interno nos dicta que debemos dormir de noche y estar activos de día, por lo tanto lo primero que podemos pensar es en trastorno de sueño.
El sueño tiene dos componentes principales, uno relacionado con el cansancio y la necesidad de dormir y el otro es el componente circadiano en relación con el ambiente día/noche.
Estos trastornos se caracterizan por una incapacidad para dormir debido al desajuste entre el reloj maestro que controla el ritmo circadiano del sueño (la Glándula pineal segrega Melatonina para dicho fin) y el horario del sueño deseado o necesario en el medio donde se desenvuelve la persona. Se puede manifestar como insomnio o hipersomnia (exceso de sueño). -Rendimiento: un buen rendimiento viene de la mano de buenos hábitos de sueño, alimentación y descanso, esto indica que el rendimiento físico- intelectual se ve afectado por el reloj. Ejemplo: para estudiar, para hacer deporte, para trabajar.
– Turnos rotativos: según estudios previos se ha demostrado que los trabajadores nocturnos o rotativos son menos eficientes y con mayor predisposición a sufrir accidentes de trabajo en relación con trabajadores diurnos, porque se produce un conflicto entre el reloj biológico y la demanda laboral.
– Jet-Lag: Nuestro reloj interno “se pone en hora” con las señales sincronizantes que recibe de su entorno. Ahora si realizamos un viaje en avión atravesando varios husos horarios, teniendo al llegar un desfasaje de varias horas entre el destino final y el lugar de origen, nuestro cuerpo suele experimentar diversos síntomas conocidos como “Jet-Lag” que se caracteriza por alteraciones de sueño, trastornos en el estado de ánimo, ansiedad, disminución del rendimiento físico, problemas gástricos, falta de apetito, entre otros. Durante el Jet-Lag se genera un desequilibrio de nuestro reloj interno que debe adaptarse rápidamente con el nuevo horario de destino.
– Síndrome metabólico: El síndrome metabólico incrementa el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, derrames cerebrales, circulatorios, enfermedades en riñones y diabetes ya que engloba una serie de trastornos clínicos que involucran un exceso de grasa abdominal, altos niveles de glucosa y triglicéridos en sangre, presión alterar alta, colesterol malo.
Además de los malos hábitos de la vida diaria (dietas hipercalóricas y sedentarismo) existen factores ambientales responsables del desarrollo de estas patologías que involucra este síndrome y el avance de dicha enfermedad.
– Cáncer: La disrupción de nuestro reloj biológico puede desencadenar problemáticas que afectarán nuestra salud de diferentes maneras. Estudios epidemiológicos sugieren que alteraciones prolongadas en el ritmo circadiano representan un factor de riesgo para el desarrollo de cáncer en humanos.
En 2007 la OMS (Organización Mundial de la Salud) clasificó a diferentes empleos como causal de Cáncer como son: los trabajos nocturnos, los trabajos rotativos (en personal de salud, fábricas, otros) y pilotos de avión y azafatas quienes sufren Jet-Lag de manera constante, presentan mayor casos de cáncer que la población normal.
Poniendo en hora nuestro Reloj Biológico desde la Aromaterapia:
La Aromaterapia es una terapia holística que utiliza los aceites esenciales extraídos de las plantas con el fin de mejorar la salud y el bienestar de las personas. Los aceites esenciales usados en el masaje, baño o por inhalación pueden llegar a tener efectos muy positivos en el estado de ánimo, aliviar dolores y molestias físicas. Para ello requiere una elección y aplicación cuidadosa de los aceites esenciales con el producto portador adecuado.
Con este fin analizamos que aceites esenciales apropiados para tratar de devolver ese equilibrio interno que nos ocupa en este trabajo. (De los A.E. elegidos, solo detallaremos las propiedades útiles para este trabajo).
Bergamota (Citrus bergamia): Este A.E. es un antiguo remedio utilizado para combatir el decaimiento causado por stress y tensión, antidepresivo, ansiolítico, preocupación, despeja la mente, insomnio. En un trabajo realizado con A.E. de bergamota administrado por inhalación mediante un difusor provocó una disminución del nivel de cortisol en saliva y un incremento del parámetro HF (high frequency) se relaciona con la actividad del sistema nervioso parasimpático, simultáneamente disminuyó la fatiga física y mental, la tensión y la ansiedad, así también la confusión mental (watanabe, 2015). En trabajos presentados por Chang (2008) y colaboradores se encontro que la aromaterapia es efectiva para la reducción del dolor y ansiedad en pacientes con cáncer terminal, predominando el uso de aceites de Bergamota y lavanda; se pueden utilizar como una intervención de enfermería complementaria para mejorar la calidad de vida de los pacientes que requieran una atención integral.
Hierba limonera (Cymbopogon citratus): Este A.E. es tonificante, ayuda a levantar el ánimo, su fragancia es euforizante. Es indicada para provocar insomnio.
Lavanda (Lavandula angustifolia): Este A.E. es un gran calmante y excelente contra el insomnio y la ansiedad. Esta confirmación la encontramos en diversa literatura científica que describe propiedades ansiolíticas atribuidas a sustancias de bajo peso molecular (linalol, éster acetato de linalol), cuando se inhala la esencia, sus moléculas actúan como estimulantes olfatorios viajando hacia el sistema límbico en el cerebro. En el caso específico del aceite de lavanda, se reduce la acción de los estímulos emocionales externos al aumentar el ácido gamma-aminobutirico (GABA), este inhibe a las neuronas de la amígdala y produce un efecto sedante similar al diazepam (Koulivand PH, 2013). Sumando con lo anterior, hay reportes que indican que el uso de este aceite mediante la aromaterapia, es capáz de reducir las ondas cerebrales Theta de 3,5 a 5,5 Hertz, mismos que se asocian con el estado de relajación mental, esta situación favorece a la consecución del sueño y una mejora en la calidad del mismo. (Avello, 2006).
Mandarina (Citrus reticulata): Este A.E. es muy alegre, refrescante,
levanta el ánimo pero a su vez es sedante y útil para trastornos
infantiles de ansiedad o problemas con el sueño. También tiene
efectos favorables en adultos.
Naranja (Citrus sinensis dulcis): Este A.E. tiene propiedades sedantes, antidepresivas y alivia el stress. La inhalación de A.E. de naranja desencadena cambios en el estado emocional y en las respuestas anatómicas e incrementa significativamente la frecuencia cardíaca y el estado de alerta lo cual evidencia un efecto estimulante (Hongratanaworakit, 2005). Nerolí (Citrus aurantium): Este A.E. tiene excelentes propiedades calmantes recomendadas en caso de pánico, conmoción, depresión y ansiedad Wilkinson, 2007).
Romero (Rosmarinus officinalis): Estudios llevados a cabo por Burnett (2004) y Peng (2007), demostraron que el extracto de romero es usado en la medicina popular como estimulador y mejorador de la memoria. Miranda & Huajuca (2004) describen las propiedades estimulantes, aperitivas, digestivas y colerética y colagogas sobre el hígado y la secreción de la vesícula biliar, esto se debe al contenido de aceite esencial lo que le confiere una acción tónica y estimulante sobre el sistema nervioso y circulatorio. Se lo usa para combatir el agotamiento, nerviosismo, astenia, alteraciones digestivas, aerofagia y flatulencia, reumatismo y jaquecas.
Sándalo (Santalum album): Este A.E. tiene propiedades relajantes, trata la ansiedad, depresión y el insomnio. Vetiver (Vetiveria zizanoides): Este A.E. es conocido como el “aceite de la tranquilidad”, nos proporciona estabilidad emocional, alivia nuestro stress, sosiega la ansiedad, es reconfortante y activador contra la depresión.
Ylangylang(Cananga odorata): Este A.E. tiene la propiedad de relajar profundamente, aliviando los trastornos psíquicos y emocionales.
Pequeña contribución analizada desde mi propia experiencia:
Debido a situaciones intensas que me provocaron stress, ansiedad e insomnio, decidí utilizar Aceites esenciales para tratar de apaciguar estos síntomas en mi persona. Para ello preparé una bruma de A.E. de lavanda, melisa y sándalo 4 gotas de cada uno, con vehicular agua desmineralizada en un atomizador de 30 ml. Atomizaba mi almohada justo antes de acostarme. Luego de varios días comencé a dormir mejor y sobre todo al despertarme sentía que había logrado descansar lo suficiente como para poder enfrentar un nuevo día de intensa actividad, además toleraba mejor los avatares de la vida en pandemia.
Algunos ejemplos de utilización de Aceites Esenciales que regulan el sueño:
Para mantenerse despierto: Aceite esencial de romero o hierba limonera: oler en un pañuelo 2 gotas puros o aplicar una bruma con estos mismos aceites siendo su vehicular agua.
Aceite post-ducha: 4 gotas de sándalo, 4 gotas de lavanda, más 2 gotas de nerolí en 20 ml de aceite vehicular para restablecer el sueño.
Vaporizador: 4 gotas de A.E. lavanda, 2 gotas de A.E. vetiver ó 4 gotas de A.E. bergamota y 2 gotas de A.E. Ylang ylang. Vaporizar 15 minutas antes de acostarse para inducirse al sueño.
Conclusiones:
El uso de Aceites Esenciales como terapia alternativa y complementaria tiene un valor que depende de la riqueza de sus principios activos, por lo que es motivo para seguir generando conocimiento para desarrollar posibles aplicaciones útiles para la humanidad.
A través de los trabajos científicos sobre los que basamos este trabajo y sumada la experiencia personal que he realizado con aceites esenciales podemos afirmar que los tratamientos aplicados tuvieron un resultado positivo ayudando a regular nuestros ritmos biológicos.
La vida actual se mueve a un ritmo tan acelerado que no deja posibilidad alguna de que nuestro organismo se adapte sin sufrir consecuencias sobre nuestra salud. La Aromaterapia nos brinda la herramienta holística que nos ayudará a volver a sincronizar ese reloj biológico que asegurará nuestra propia subsistencia.
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Imágenes Complementarias:
| IMÁGENES DE LAS PLANTAS GENERADORAS DE ACEITES ESENCIALES |
